Cazador de sonrisas

Después de nuestro regreso (sí, ya sabemos que nadie nos ha echado de menos...), empezaremos con una pequeña crítica de uno de los últimos cómics que han caído en nuestras manos:

Se trata de "Cazador de Sonrisas" de Agustín Ferrer Casas, 

la primera publicación de la editorial Valenciana "Grafito Editorial".

La razón por la que éste cómic cayó en nuestras manos fue casi de causalidad, aunque he de decir que, a mí al menos, me ha dejado un buen sabor de boca. (Por cierto, con por casualidad queremos decir que fue cuando el editor nos llamó porque estaba por Madrid y no quería comer sólo, y en ese momento le obligamos a que nos regalara un ejemplar).
Somos personas malvadas y perversas, le llevamos a comer cocido... ¡Muajajajaja! Y encima, se quejó del frío. ¡Pero si en Madrid no hace frío!

En el apartado gráfico, no suele ser en lo que más me fije en un cómic normalmente, pero he de decir que me ha parecido bastante acertado y que consigue sumergirte en la historia.
A mi el dibujo me ha fascinado, tiene ese aire retro que te transporta y hace que te apetezca entrar en el típico bar de los años 60 con el suelo de ajedrez, la máquina de discos al fondo y sentarte en los reservados para pedirte un batido de fresa con nata.
Un estilo muy cuidado con un colorido precioso.

Respecto al guión, lo cual para mí suele ser lo más importante, sobre todo en este tipo de "novelas gráficas", es bastante sólido, y la ambientación hace que todo resulte muy creíble.

Y todo ello es porque tiene una ambientación estupenda en la que se nota una documentación con mucho mimo, cómo podréis ver en las páginas finales de este tomo.

Vamos a intentar resumir la trama sin intentar caer en muchos spoilers: se trata de la historia de un dentista que no siente ningún tipo de empatía por el dolor ajeno y que ejerce su actividad cerca de una base militar americana de principio de los años 60 (como comprenderéis, con su profesión, su contacto con el dolor es bastante habitual). A partir de ahí, la historia consigue sumergirnos, a lo largo de sus 120 páginas, en una espiral de sucesos que acaban llevándonos hasta un desenlace que para mí resulta un tanto previsible. Pero no os llevéis a engaño con estas últimas palabras, puede que no me sorprendiera el final, pero eso no significa que no disfrutara de una historia totalmente atada y contada con mucho cariño.
Son de esas historias de las que hace replantearte si ir al dentista es una buena idea. Al protagonista, aunque sepas que no puede simpatizar con tu dolor y que no está muy bien de la cabeza, le acabas cogiendo cariño. Por eso, puede que el final de la historia te lo acabes imaginando.

El cómic viene además con una lámina firmada y un póster desplegable con una pequeña historia en la trasera, que a la hora de desplegarla no sabía muy bien por dónde tenía que empezar a leer.
También coincido que al no estar numeradas las viñetas que aparecen en el póster, hacía un poco confuso el leerlo, porque con las prisas, lo despliegas y luego te lías a leer. No te das cuenta que debes ir abriendo y leyendo...

En definitiva, para mí ha resultado una muy buena historia, que se nota que ha sido cuidada al detalle y que se ha trabajado con mucho mimo. Un cómic que creo que todo amante del género debería aprovechar para echar una ojeada y tenerlo en su estantería, y que se lee prácticamente de una sentada.
A mi me ha entusiasmado la historia, el dibujo y la edición, salvo que pondré un pequeño "pero" a esta última.
La historia consigue su cometido, que es que te metas en ella de un salto, y el color parece que está dado con lápices, así que cuando lo tuve en las manos me di cuenta que el papel estucado y brillante hace que pierda un poco ese "rollo sesentero". 
Pero en ningún caso, desluce la brillante edición del tomo.

Ahora sólo queda esperar a ver las siguientes publicaciones de esta nueva editorial y, cuando sea rico y famoso, hacerle una entrevista al "señor editor". Y por supuesto, esperar a ver cual es el siguiente trabajo de Agustín Ferrer e intentar encontrarle en algún sitio para que nos firme nuestro ejemplar.
Al señor editor ya lo pillaremos... ya... Y al autor también. ¿Para cuando venís a Madrid? XD

De vueltas a las andadas

Bueno, pues este matrimonio de Frikys se decide a volver a intentar esto de llevar un blog.
¡Y dale con Friky! Que no se escribe así... que se escribe Friki. Creo que esta discusión la vamos a tener "hasta el infinito y más allá".

Nuestra única intención para ello es que queremos ser los mejores blogeros de la historia, que todas las editoriales nos regalen juegos, poder ir a pre-estrenos de manera gratuita y dedicarnos única y exclusivamente a ello.
Así me gusta... ¡con ansias de poder! Yuhuuuu...

Eso, o que simplemente somos un poco raros y nos gusta compartir las cosas que nos han emocionado y un poco de nuestra experiencia como matrimonio de iguales y futuros padres de un bebé que esperemos que nos salga mínimamente friky (y haremos lo que esté en nuestra manos para ello).
Sí, somos raretes, y nos gusta, leñes.
Nuestro nene está a puntito de salir del horno-mami, y bueno, cómo dice mi señor esposo, nos gustaría llevarlo por el mal buen camino del frikismo en general.

Hace ya mucho tiempo, en una galaxia muy muy lejana, abrimos este blog. Pero, por suerte o por desgracia, hemos pasado por una "serie de catastróficas desdichas" que nos han llevado a tenerlo totalmente abandonado. Al final todo derivó en que tuvimos que abandonar nuestro nidito de amor, mudarnos con mis padres y sufrir cosas por las que no desearía a nadie que pasara...
Recuerdo nuestro nidito de amor con mucho cariño, pero eh, tu madre cocina de lujo y no me quejo XD XD
Todas las "catastróficas desdichas" nos han hecho más fuertes para poder conseguir salir de los baches y no tropezar (demasiado) con las piedras del camino.

Pero ahora parece que todo es mucho más sencillo para poder hacernos cargo del blog, y es que, ¿qué problema hay porque hayamos decidido montar un negocio hace escasos 6 meses y encima vayamos a tener un bebé?
Tal y como yo lo veo, simplemente tendremos un tiempo limitado para ir a otros sitios y encima poco dinero, así que nos tocará disfrutar mucho más de los placeres caseros. Y si hemos podido aguantar lo de los últimos dos años y seguimos queriéndonos como el primer día, es que estamos para aguantar lo que nos tiren encima, aunque eso sea un blog con actualizaciones periódicas.
Claaaaaro... ¿qué problema hay? Bebé con caca. Bebé con fiebre. Bebé con hambre. Mamá con sueño. Mamá con mala leche. Mamá con hormonas *yiiiiiiiha*.
Nada, nada, que son minucias. XD
Pero sí, mi señor esposo y yo, a pesar de las "jodiendas" pasadas, seguimos siendo un par de jóvenes enamorados. Jeje. Jóvenes he dicho.

De todos modos, y por si consideráis que esto os puede llegar a interesar aunque sea un poco, os invitamos a que leáis algunas de las entradas anteriores a fin de que os hagáis una idea de cómo va a ser esto.
Hay un par de tutoriales chulos que hice en su momento y reseñas majas de mi señor esposo. Nos lo curramos. Ains... qué poco duró.

Pero, lo más importante, ¿quienes somos?:

- Seoman: Yo soy el que utiliza esta letra y lo que podría casi considerarse un friky multitarea. Me encantan los videojuegos, la lectura, las series, las películas, los cómics, y casi todo lo que pueda caer en mis manos. Últimamente estoy consiguiendo meterme algo más en eso del rol, y parece que ya va teniendo un rinconcito al lado de nuestros juegos de mesa. También soy abogado, gestor y administrador de fincas, pero creo que eso no os interesa mucho a ninguno. Y bueno, considero que Richard Dean Anderson es y siempre será el General Jack O'Neill.

- laNane: Y yo soy la que utiliza esta "tipografía" (¿Fran, no has aprendido nada?), otra friki en general, que le gusta de todo un poco y no sabe de casi nada. Comics, pelis, series, libros... leo o veo casi cualquier cosa por el placer de hacerlo.
Hace cuatro años, cuando mi madre me regaló una máquina de coser, volvió a despertar en mi la afición de confeccionar disfraces (o cosplay, palabreja que todavía me cuesta usar), y es uno de mis hobbies más queridos y odiados al mismo tiempo.
También soy diseñadora gráfica y he conseguido trabajar de ello.
Pero lo más, más importante, es que voy a ser mamá dentro de nada.
Ah, por cierto, también es importante saber que primero fue McGyver. El McGyver que cruza puertas estelares y arregla entuertos allá dónde fuere. *ñañañañaña*